Existe un espacio inmenso
entre la voluntad y lo posible
lo intangible, lo lejano...
La noche ama entre tinieblas
pensamientos extraños.
Vivir es un constante caos.
Pasar desapercibido
con resortes de humanidad,
pensar por si mismo y sentir,
que el tiempo es ilusión.
La profundidad del laberinto,
lo sensible, la hojarasca.
Sinapsis paralelas de neuronas
enseñadas a engendrar,
lo esencial para morir en vida.
Aragüez/VientoDelSur.